Desde la creación de la Fundación, Bartolomé March quiso dotarla para que fuera un centro de
actividad cultural y artística de primer orden para la ciudad de Palma y para toda Mallorca.
Con la apertura al público, en 1970, de la biblioteca que lleva su nombre ya había mostrado su munificencia
y el destino que quería dar al patrimonio artístico que había atesorado durante décadas, cuando fue
reconocido como uno de los coleccionistas más importantes de España. Por todo ello desde la dirección
de la institución se valora y se da prioridad a la colaboración con las instituciones políticas y culturales
de Mallorca. Por ser desde hace décadas un referente cultural de la ciudad son varias las actividades
conjuntas con el Ayuntamiento de Palma, como son los conciertos y las exposiciones de premios. |